Kartas a Kim
La chica del grupo (Editorial Contra, 2015) ofrece un relato de una mujer en la música independiente, en primera persona, e incorpora una perspectiva feminista en la narración autobiográfica. En Kartas a Kim, esta nueva sección del webzine Sisterhood, ahondaremos en las experiencias que destaca Gordon en el libro y que reflejan las tensiones de un patriarcado musical que nos afecta a todas, hasta a las que llegan a la cima y machacan techos de cristal.
Ágata Ahora. Kim Gordon acaba de publicar La chica del grupo (Editorial Contra, 2015), una autobiografía en la que repasa su vida y su carrera artística. Así en general, me gusta mucho Gordon, soy fanísima de Sonic Youth y me parece bastante bien Body/Head, su último proyecto en solitario, así que claro, me interesaba mucho la perspectiva que pueda dar sobre su vida y su persona. Me he lanzado a leerlo y, aprovechando mi estancia en una isla, lo he devorado en un par de días. Mi impresión después de la rauda lectura es que es un libro entretenido y no es una maravilla. Para mi gusto, peca un poco de autocomplaciente (ains, los yankis y su utopía autoproclamada, ¡U-S-A!), no ahonda demasiado, bueno, digamos “lo suficiente para una fan curiosa”, en Sonic Youth ni en general en la faceta musical de Kim Gordon –creo que ella se siente más orgullosa de su trabajo como artista visual-, y quizás toma excesivo peso su ruptura con Thurston Moore y su relación con su hermano. Pero también tiene cosas muy guais: describe varias escenas vibrantes en las que hubiera dado un trozo de mi meñique por estar –el grunge de los 90’s, la New York en los 70-80, en nowave, la California post-Mansoniana…; incluye fotos molonas; presenta en capítulos cortos y directos una retrospectiva amplia de su vida; genera un relato de una mujer en la música, en primera persona, y reflexiona a menudo en el texto sobre ello.
¿Qué significa para Kim Gordon ser la chica del grupo? ¿cómo ha sido la experiencia de una de las grandes estrellas del rock alternativo de los 90’s? ¿nos dice eso algo sobre el panorama general? Yo creo que sí, y me parece interesante utilizar la vivencia de Gordon para reflexionar en voz alta y compartida sobre la mujer en la música. Con Kartas a Kim pretendo seguir desarrollando ciertos hilos que aparecen en el libro, en particular los que tratan la dimensión de género. Lo haré aquí, en la webzine de Sisterhood, y la sección se llamará Kartas a Kim. ¿Habrá spoilers del libro original? Bueno, algo sí, pero emplearé solo frases o párrafos del libro, que yo creo que no destripan nada. Tampoco creo que el libro tenga grandes intrigas.
Por otro lado, claro, al extraer breves fragmentos de un libro de más de 300 páginas corremos el riesgo de descontextualizar las declaraciones de la autora (efectivamente, así que: ¡leeros el libro entero!), pero Kartas a Kim no son los testimonios del Kim Gordon, sino mis reflexiones a partir de la lectura del libro. Espero que os resulten interesantes y si tenéis cosas que añadir, estaré encantada de recibir vuestros comentarios en sisterhood.mad@gmail.com. ((Buah, me acabo de imaginar un club de lectura feminista/rockero. Anda que no molaría.))
Bienvenidas.
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Kartas a Kim es un diálogo ficticio con Kim Gordon (Sonic Youth, Body/Head) a través del libro La chica del grupo (Editorial Contra, 2015). Con un té de ginseng en la mano, nos centramos en la relectura con perspectiva de género de sus experiencias en la música independiente desde los 80, a partir de preguntas como: ¿Qué significa para Kim Gordon ser la chica del grupo? ¿cómo ha sido la experiencia de una de las grandes estrellas del rock alternativo de los 90’s? ¿nos dice eso algo sobre el panorama general?